Alemania: los cementerios atascados con cadaveres que ya no se descomponen: ¿ culpa de los conservantes en la comida?

¡Rapido! ¡Que Carolina Punset y sus dicipulos ecocapitalistas de Altea se den prisa! Alli hay materia para que la prensa hable de ellos durante un tiempo hasta la proxima chorrada: un cementerio bio en Altea…todo pintadito de verde…y con girasoles por todas parte…

Pues no te ries ni te lo tomes a broma: bien podría ser lo proximo. Esto, o la vuelta de los muertos vivientes. Y no en la caja tonta. The Walking Deads están a punto de aparecer en Alemania…de momento, los cadeveres de los fallecidos no se pudren.

Traducción: ALTEATEQUIEROVERDE

«Hombre, recuerda que eres polvo y al polvo volverás», este versículo del Génesis ya no es una realidad. En Alemania, alrededor de cuarenta cementerios no están aceptando más entierros, porque están llenos de cadáveres de difuntos no descompuestos. Los científicos están preocupados por este fenómeno…

Un empresario en pompas fúnebres en Berlín, Walter Müller afirma que «los cadáveres inhumados hace treinta años parece haber sido enterrado la semana pasada […] Es como si hubieran marinado en conservantes”. Al enterrar los restos de una persona, con el tiempo se descomponen y se “hunden”, desaparecen en la tierra y los sepultureros pueden ya «recuperar» la tumba para colocar nuevos ataúdes que a su vez se hundirán en la tierra.

El Dr. Rainer Horn explica que «siempre hemos compartido o reutilizado tumbas. Uno añade cuerpos y la naturaleza sigue su curso”. Sin embargo, este proceso de descomposición que llevaba de ocho a diez años, ahora lleva mucho más tiempo. ¡Un tercio de las tumbas de Alemania donde los cuerpos enterrados hace treinta o cuarenta años no se corrompen!

 

Esta situación preocupa tanto a las empresas de pompas fúnebres como a los administradores de cementerios y a los científicos que organizaron una conferencia en Hamburgo para discutir de las causas y de las posibles soluciones a este problema. Se han propuesto varias hipótesis, entre ellas una que acusa a nuestra dieta demasiado rica en conservantes y otra que apunta a la contaminación y los pesticidas que destruyen las bacterias necesarias para descomponer. Estamos todavía al principio de la investigación y los científicos no son capaces de ponerse de acuerdo. Sin embargo el Dr. Horn declaro: «los procesos de descomposición natural se han ralentizado. Creemos que este fenómeno se debe a la ausencia de una bacteria importante, pero no sabemos la causa de esta ausencia.».

Se han propuesto soluciones como el uso de sarcófago de hormigón para que el aire fluya y que la descomposición se lleve a cabo en una docena de años y luego se vuelva a utilizar el ataúd, pero este sistema no parece que guste por su lado “desalmado». Otro enfoque fue sugerido por los geólogos de Baden-Württemberg, Werner  Weinzierl Y Frank Waldmann, quien sugieren reemplazar los ataúdes de roble por pino, ya que se descompone más rápido. El Estado Federado de Renania del Norte-Westfalia, por su parte, planea modificar su legislación y permitir el entierro del cuerpo en bolsas de tela, yute o algodón.

otros Länder (estados federales) ya permiten entierros en plena naturaleza, donde los árboles sirven además de lápidas, con la esperanza de que en estos cementerios «orgánicos» se sustituya a los entierros tradicionales. En Noruega, se propone inyectar productos químicos para accelerar el proceso...(¿Más productos químicos añadidos a las 100 000 moleculas inventadas y utilizadas ya por el homo «sapiens» moderno? Nota del traductor?

De momento, los empleados de los cementerios austriacos y alemanes se ven obligados a cavar fosas más profundas y a bajar al anterior ocupante de un piso para que el nuevo se quede arriba…

traducción ALTEATEQUIEROVERDE. Fuente: COURRIER INTERNATIONAL.

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