Ucrania : el retorno de la propaganda de guerra. ¡Hemos elegido olvidar los ejemplos de los héroes de la resistencia y el De Charles De Gaulle apoyando al presidente Zelensky !

Jueves, 17 de marzo de 2022

 Por Thierry Meyssan para la Red Voltaire

Traducido por Alteatequieroverde: Borell Borell cuidado con el: el blog no es responsable de las ideas aqui expresadas. Militamos por la libertad de pensamiento y de expresión. Que le guste o no a los psicorigidos del pensasmiento unico.

Stepan Bandera (centro), llevando la Cruz de Mérito alemán de 2ª clase con espadas. Él nunca reivindico ser un nazi, sólo un «nacionalista» ucraniano. Ya en 1935, Bandera defiende la violencia política. Ha hecho asesinar a sesenta personalidades, incluyendo a dos ministros polacos. Durante la Segunda Guerra mundial, organizó el exterminio de los intelectuales judíos  y de los eslavos. El nuevo régimen ucraniano ha erigido monumentos a su gloria, uno en Lviv, la ciudad donde supervisó una masacre.

El público occidental está indignado por la guerra en Ucrania y se moviliza para llevar ayuda a los Ucranianos que huyen. Para todos, es evidente: el dictador Putin no soporta la nueva democracia de ucrania.Como cada conflicto, se nos dice que los otros son malos, mientras que nosotros somos los buenos.Nuestra reacción es la de gente engañada por la propaganda de guerra, porque no acuerdan de los conflictos anteriores e ignoran todo de Ucrania. Empecemos de cero.

¿QUIÉN EMPEZÓ ESTO?

Como en el patio de la escuela cuando nuestros compañeros se peleaban entre ellos, queremos saber quién empezó. En este punto, no hay foto: hace ocho años, Estados unidos ha propiciado un cambio de régimen en Kiev, con la ayuda de pequeños grupos armados. Estas personas se llaman a sí mismos » nacionalistas «, pero no en el sentido en que lo entendemos. Ellos pretenden ser verdaderos ucranianos de origen escandinavo o proto-germánico, y no eslavos, como los rusos. Ellos dicen ser seguidores de Stepan Bandera [1], el jefe de los colaboradores ucranianos de los nazis, el equivalente de Philippe Pétain de un punto de vista simbólico para los franceses, pero sobre todo de Joseph Darnand, y los soldados de la División SS francés Carlomagno (o de la División Azul española NdT) . Los Ucranianos, que hasta ahora se consideraban a sí mismos de origen escandinavo y proto-germánico por una parte, y eslavos por otra, les llaman “neo-nazis”.

Aquí, en Francia, la palabra «nazi» es un insulto que puede ser utilizado para cualquier cosa. Históricamente, es un movimiento que defendía una visión de la humanidad para justificar los imperios coloniales. Según ella, los hombres pertenecen a diferentes «razas», uno diría hoy a «especies» diferentes. No pueden tener descendencia, como las yeguas y los burros. En la naturaleza, estas dos especies engendran mulas, pero estos son generalmente estériles. Esta es la razón por la que los nazis prohibieron las mezclas inter-racial. Si somos de diferentes razas, algunas son superiores a las demás, de aquí la dominación occidental sobre los colonizados. En los años treinta, esta ideología fue considerada como una «ciencia», y se enseñó en las universidades, especialmente en los Estados unidos, Escandinavia y Alemania. Muy grandes científicos la defendieron. Por ejemplo, Konrad Lorenz (Premio Nobel de medicina en 1973) fue un ferviente nazi. Él escribió que con el fin de mantener la raza, era necesario extirpar los homosexuales de la masa y eliminarlos, como un cirujano extirpa un tumor porque mezclaban su genética con la de otras razas, sin que nos demos cuenta de ello. Estos científicos no fueron más serios que los que anunciaron el apocalipsis durante el brote de Covid-19. Tenían el título de » científico «, pero no el enfoque razonable.

La Rusia moderna está construida sobre la memoria de lo que los Rusos llaman la «Gran Guerra patriótica» y nosotros » Segunda Guerra mundial». No tiene el mismo significado para ellos como para nosotros. Aquí, en Francia, la guerra sólo duró unos meses, y luego hemos creído en la victoria nazi, y entramos en la Colaboración. Vimos nazis, y pétainistas arrestar, a partir de 1940, 66 000 personas, generalmente por «terrorismo» (resistencia). Y luego, a partir de 1942, arrestar a 76 000 judíos porque eran una «raza inferior» y enviarlo al este, de hecho, a los campos de exterminio. Por el contrario, en la Unión soviética, los nazis no arestaron a nadie. Querían exterminar o esclavizar a todos los eslavos, en treinta años, con el fin de liberar un «espacio vital», donde se podría construir un imperio colonial (Generalplan Ost). Esta es la razón por la que en URSS hubo 27 millones de muertos. En la memoria de los rusos, los nazis son una amenaza existencial, no para nosotros.

Cuando estas personas llegaron en el poder en Kiev (hace 8 años NdT), que no se han declarado a sí mismos como » nazis «, sino como «nacionalistas», en el sentido de Stepan Bandera, que también dijo que era «nacionalista» y no » nazi «, pero sobrepujaba con respecto a sus intenciones genocidas contra los eslavos y judíos. El gobierno actual dijo que el gobierno anterior al actual era » pro-rusos «, que es objetivamente falso, y prohibió todo lo que evoca la cultura rusa. Y en primer lugar, el idioma ruso. Los Ucranianos eran predominantemente bilingüe, hablaban ruso y ucraniano. De repente, el gobierno obligo a la mitad de ellos que no hablaran su idioma en las escuelas y en las instituciones. La región del Donbass, muy de habla rusa, se sublevo. Pero también el de la minoría húngara, que recibia una educación en su propia lengua y que ha sido apoyado en su reclamo por parte de Hungría. Los Ucranianos en el Donbass, han exigido que los distritos de Donestsk y Luhansk tengan un estatuto de autonomía y restaurar su idioma. Estas prefecturas (oblast en ruso) se declararon repúblicas. Esto no significa que aspiraban a la independencia, pero sólo a la autonomía, tales como la República de California en los Estados unidos o las ex-repúblicas de la URSS.

En 2014, el presidente François Hollande, y la canciller alemana, Angela Merkel, pusieron a la misma mesa de negociación a la gente de Kiev con los del Donbass y negociaron los acuerdos de Minsk. Francia, Alemania y Rusia, eran los garantes de estos acuerdos.

Kiev siempre se ha negado a aplicarlos a pesar de haberlos firmado. En lugar de eso, el gobierno de Kiev armo a las milicias «nacionalista» y les han enviado pasarse los nervios a la frontera del Donbass. Todos los extremistas en el mundo occidental vinieron pegar tiros en Ucrania. Estos paramilitares fueron el mes pasado, según el gobierno de Kiev, 102 000. Ellos forman un tercio del ejército de ucrania y se integraron en las Fuerzas de defensa territorial. 66 000 nuevos » nacionalistas «, a pesar de ser extranjeros, han llegado en refuerzo de todo el mundo, en ocasión del ataque ruso.

Durante los ocho años que nos separan de los acuerdos de Minsk, estos paramilitares han matado a más de 14.000 personas en el Donbass, según el gobierno de Kiev. Esta cifra incluye sus propias pérdidas, pero no son numerosas. Rusia ha establecido su propia comisión de investigación. No solo contabilizo a los muertos, pero también de heridos grave. Encontró 22 000 víctimas. El presidente Putin habla de » genocidio «, no en el verdadero sentido de la destrucción de un pueblo, pero en el sentido jurídico de los crímenes cometidos por órdenes de las autoridades en contra de un grupo étnico.

Aquí está el problema: el gobierno de Kiev no es homogénea, y nadie ha dado claramente el orden de una masacre. Sin embargo, Rusia tiene los presidentes Petro Porochenko y su sucesor, Volodymyr Zelensky como responsables. También nosotros, ya que hemos sido los garantes de los acuerdos de Minsk que nunca se aplicaron. Sí, somos co-responsables de esta masacre.

Lo peor todavía está por venir. El 1 de julio de 2021, el presidente Zelensky, que armaba a los paramilitares «nacionalistas» y se negaba a hacer cumplir los acuerdos de Minsk, promulgo la Ley n°38 de pueblos autóctonos [2]. Se garantiza a los tártaros y a los Judíos caraítas (es decir, los que no reconocen el Talmud) el ejercicio de sus derechos, en particular el poder hablar su idioma, pero no a los esclavos. Ellos no existen. Ellos no están protegidos por ninguna ley. Estos son unos Untermenschen, unos sub-humanos. Era la primera vez en 77 años que una ley racial fue adoptada en el continente europeo. Usted piensa que hay organizaciones que defienden los Derechos humanos, y que habrán protestado. Pero nada. Un gran silencio. Lo peor: el aplauso de Bernard-Henri Lévy.

Dmytro Yarosh. Detrás de él la bandera de Stepan Bandera : rojo y negro con el Tridente de ucrania. Agente de las redes stay-behind de la Otan. En 2007, realizo la alianza de los neo-nazis y europeo con los yihadistas en el medio oriente en contra de Rusia. Jugó un papel central en el cambio de régimen en 2014. Ahora es asesor especial del jefe de las ejércitos de ucrania.

¿POR QUÉ EL RECURSO A LA GUERRA?

Nuestra visión de los acontecimientos es distorsionada por nuestros prejuicios. Es más marcada en los Estados bálticos y los países antiguamente aplastados por la » doctrina Brezhnev». Estas personas piensan a priori que los rusos son los herederos de los soviéticos. Sin embargo, los principales dirigentes soviéticos no eran rusos. Joseph Stalin era georgiano, Nikita Khrushchev, ucraniano, etc., e incluso Leonid Brezhnev era ucraniano.

Mientras las repúblicas de Donetsk y Luhansk eran ucranianas, la masacre de sus habitantes era un asunto exclusivamente de ucrania. A nadie era autorizado a protegerlos. Sin embargo, con la firma de los Acuerdos de Minsk aprobados por el Consejo de seguridad de las Naciones unidas, Francia y Alemania han tomado la responsabilidad de llevarla a cabo. Lo que no hicieron.

La naturaleza del problema ha cambiado cuando, el 21 de febrero de 2022, Rusia reconoció la independencia de las dos repúblicas del Donbass. La masacre de sus habitantes no fue ya un tema nacional, sino internacional. El 23 de febrero, el Consejo de seguridad se reunió de nuevo mientras el ejército ruso se estaba preparando para intervenir. Durante la reunión, el Secretario general de la Onu, António Guterres, no ha discutido ni la legitimidad del reconocimiento de las repúblicas rusas de Donbass, ni la intervención rusa contra el neo-nazis. Sólo pidió a Rusia dejar otra oportunidad a la paz [3].

El derecho internacional no prohíbe la guerra, sino que está tratando de evitarla. Sin embargo, como esta reunión del Consejo de seguridad no dio frutos, Rusia estaba en su derecho de ayudar a la gente del Donbass asesinados por los neo-nazis. Lo que hizo al día siguiente, el 24 de febrero.

El presidente Vladimir Putin, quien ya había esperado ocho años, ya no podía esperar más tarde. No sólo porque cada día la gente muere, no sólo porque el ejército ucraniano preparaba  una gran masacre el 8 de marzo, [4], pero las leyes de la federación de Rusia lo hace personalmente responsable de las vidas de sus conciudadanos. Preparando su eventual éxodo, la gran mayoría de los habitantes del Donbass han adquirido la ciudadanía rusa en los últimos años.

El ÉXODO DE 2 MILLONES de UCRANIANOS

Como en todas las guerras de la Otan, estamos siendo testigos de la huida de la población. Para el francés, esto nos recuerda el éxodo de 1940 ante el avance de las tropas alemanas. Se trata de un fenómeno de pánico colectivo. El francés creía que la Reichswehr iba a cometer las mismas violaciones en masa que había sido atribuido al principio de la Primera Guerra mundial a la Deutsches Heer. Pero los alemanes eran muy disciplinados y no recurrieron a este tipo de violencia. Finalmente, la huida de los franceses sin meta no tenía ninguna razón objetiva, otra que el miedo.

La OTAN, desde la guerra en Kosovo, ha desarrollado el concepto de ingeniería de desplazamiento de población [5]. En 1999, la CIA organizó en tres días el desplazamiento de más de 290.000 personas de Kosovo de Serbia hacia Macedonia. Si usted tiene más de treinta años de edad, recordara el vídeo horroroso de esta larga línea de personas, caminando una detrás de otra, en filas de decenas de kilómetros a lo largo de las líneas de ferrocarril. Se trataba de hacer creer a la limpieza étnica por el gobierno de Slobodan Milošević y para justificar la guerra que estaba por venir. Los Kosovares no sabían por qué estaban huyendo, pero creían encontrar un futuro mejor, donde iban. Hace siete años, recuerda el éxodo de la gente de Siria. Se trataba de debilitar el país, privándolo de su población. Esta vez, se trata de tocar sus emociones con las mujeres y los niños, sin dejar salir a los hombres necesarios para luchar contra los Rusos.

Cada vez, estamos disgustados. Pero no es porque los Kosovares, los Sirios y los Ucranianos sufren que tienen toda la razón.

La Unión europea acepta a todos los refugiados ucranianos. Los Estados miembros de Schengen, aceptan a todas las personas que se presentan como huyendo de la guerra en Ucrania. De acuerdo a la administración alemana, alrededor de una cuarta parte de estos » refugiados «, que juran trabajar y vivir en Ucrania, dispone no de pasaporte ucraniano, pero argelino, bielorruso, indio, marrueco, nigeriano, o uzbeko ; gente que claramente aprovechan la puerta abierta para ser registrado legalmente en la Unión europea. La falta de verificación de su estancia en Ucrania no se realiza. Para los empresarios alemanes, se trata de regularizaciones que no dice su nombre.

Debemos preguntarnos por qué el pueblo ucraniano no manifiesta su apoyo a su gobierno. Durante la guerra de Kosovo, los habitantes de Belgrado habían mantenido una vigilia de día y de noche en los puentes de la ciudad para evitar que la Otan bombardeara. Durante la guerra en Libia, varios millones de personas se habían reunido en Trípoli para mostrar su apoyo al Guía Mouamar Gadafi. Durante la guerra en Siria, un millón de personas han expresado su apoyo al presidente Bashar al-Assad. Esta vez: nada. Por el contrario, se nos dice que el equipo de la Defensa territorial caza «saboteadores rusos infiltrados», mientras que la OSCE certifico que no había ningún soldado ruso en Ucrania antes del inicio de la operación.

EL CHOQUE DE LAS IMÁGENES

Hubiéramos debido aprender de las guerras del pasado que la primera víctima es siempre la verdad. Desde la guerra de Kosovo, la Otan se ha convertido en un maestro de la guerra de la propaganda. Cuando ocurrió  cambiaron el portavoz de la organización en Bruselas. Su reemplazo, Jamie Shea, conto cada día una historia ejemplar, acerca de los horrores de los criminales serbios, o acerca de la ejemplar resistencia de los Kosovares. En esta época publicaba un diario de papel, por fax, el Diario de la Guerra en Europa. Yo resumía las declaraciones de la OTAN, y los despachos de las pequeñas agencias de prensa en los Balcanes. Cada día, vi las dos versiones alejarse un poco más la una de la otra. En mi mente, la verdad tenía que estar entre las dos. Una vez que la guerra había terminado, nos dimos cuenta de que los cuentos de Jamie Shea eran pura invención destinada a ennegrecer las columnas de los periódicos crédulos, mientras que los informes de noticias de pequeñas agencias de prensa en los Balcanes estaban diciendo la verdad. Y la verdad no la contaba la OTAN.

Yo por lo tanto contemplo el consenso de los medios de comunicación occidentales con un cierto grado de desconfianza. Por ejemplo, cuando se nos dice que Rusia bombardeo una planta de energía nuclear, pienso en las mentiras del presidente George W. Bush sobre las armas de destrucción masivas del tirano » Saddam «. O cuando se nos dice que los Rusos han bombardeado un hospital de maternidad en Mariupol, recuerdo a los bebé-kuwaiti removidos de sus incubadoras por los terribles iraquí. O cuando nos aseguran que Putin es un loco  al igual que Hitler, recuerdo la forma en que tratamos a Mouamar Gadafi o a Bashar al-Assad.

Esta es la razón por la que no me tomo estas alegaciones en serio. Los soldados ucranianos de la isla de las serpientes no han sido sacrificados basjo las bombas, como afirmó el presidente Zelensky. Se riendieron a los militares rusos, como se admitió más tarde. El memorial judio en Babi Yar no ha sido destruido por los rusos que respetan todas las víctimas de la barbarie nazi. La central Zaporijjia no ha sido bombardeada. Se mantuvo durante varios días gracias a los equipos mixtos rusos y ucranianos. Por otra parte, el Organismo internacional de energía atómica organismo internacional de energía atómica (OIEA) ha confirmado que no había habido ningún peligro de radio-activad. La maternidad de Mariupol no ha sido bombardeada. Ha sido evacuada tres días antes, y se convirtió en cuartel del Regimiento de Azov (neo-nazis), como se había informado en ese momento la federación de Rusia ante las naciones unidas.

Así que cuando me dicen que hace falta matar al «dictador» Putin, permanezco impasible.

LAS BATALLAS

¿Cómo no darse cuenta de que las imágenes que vemos de las «batallas» del victorioso ejército de ucrania son siempre las mismas? ¿Cómo no darse cuenta de que uno sólo ve un pequeño número de vehículos destruidos? ¿Nuestros reporteros de guerra nunca han visto una guerra real? No interpretamos las imágenes según lo que vemos, pero sobre los comentarios que las acompañan.

La semana pasada, nos explicaron que el ejército ruso rodeaba a Kiev, a quince kilómetros a la redonda, que está progresando cada día (pero, sin embargo, a quince kilómetros) y que va a dar el asalto final. Cuando nos explicaron que el «dictador» Putin quiere la piel del simpático presidente Zelenski (que ha armado a los neo-nazis, y ha promulgado la ley racial), me echo un paso atrás.

Los ejércitos rusos nunca han tenido como proyecto llegar a las grandes ciudades. Salvo Mariupol). Ellos están luchando en contra de los paramilitares » de los nacionalistas, de los neo-nazis. Como francés, como partidario de la Resistencia contra los nazis, los ejércitos rusos tienen por lo tanto toda mi admiración.

El ejército ruso aplica en Ucrania la misma táctica que en Siria: rodear las ciudades que sirven como refugio a los enemigos, a continuación, abrir corredores humanitarios con el fin de dejar salir a los civiles, y, finalmente, golpear los combatientes que quedan en el interior. Este es el motivo por el cual los paramilitares neonazi bloquean los pasillos y impiden a la población  huir. Este es el principio de escudos humanos.

Se trata de una guerra de movimiento. Es necesario hacerlo rápido. Las tropas rusas se mueven en camiones y vehículos blindados. No es una cuestión de batallas de tanques. Estos son ahora inoperante en los teatros de operación. Hemos visto que, en 2006, Hezbolá hacían polvo a los Merkavas israelíes. Las tropas rusas se mueven en vehículos de motor, es por esta razón van blindados. Como hemos proporcionado decenas de miles de misiles anti-tanque al ejército, a los ucranianos paramilitares neonazis incluidos, nuestras armas les destruyen como destruyen sus camiones. Estas no son las batallas, sólo emboscadas.

El Estado de Israel no se equivocó: el Primer ministro Naftali Bennett ha aconsejado al presidente Zelensky aceptar las condiciones para la paz. Es decir, no a deponer las armas, pero a destruir todos los monumentos dedicados a Stepan Bandera y detener a los nazis, que fueron incorporados en la Defensa territorial de ucrania.

TRES NUEVOS PROBLEMAS

Como si la situación no era muy complicado, el presidente, Zelensky anuncio en la Conferencia sobre Seguridad en Munich, justo antes de la guerra, de su intención de adquirir la Bomba atómica, en violación de la firma del Tratado sobre la no proliferación de las armas nucleares.

Entonces, los ejércitos rusos capturaron y publicaron un documento de trabajo del gobierno de Kiev acerca de la planificación de un ataque militar en Crimea y el Donbass, el 8 de marzo.

Finalmente, el ejército ruso ha desvelado una docena de laboratorios de investigación sobre armas biológicas que había trabajado para el Pentágono. Anuncio que publicara la documentación incautada y destruyo 320 contenedores de agentes patógenos. Los Estados unidos, los cuales son signatarios de la Convención de las Naciones unidas sobre la prohibición de las armas biológicas, la respetan país adentro, pero la viola en el extranjero. Algunos documentos ya habían sido publicados hace dos meses por un periodista búlgara. El 8 de marzo, el ministerio chino de Asuntos exteriores ha pedido al Pentágono dar explicaciones acerca de 330 bio-laboratorios en más de 30 países. El departamento de Estado ha negado estas prácticas. Pero el secretario de Estado, Victoria Nuland, danso explicaciones en el Senado, reconoció que el Pentágono estaba trabajando en estos programas realizados en el extranjero, y que ella estaba preocupada por la idea de que estas investigaciones cayeran en manos de los rusos. Cuando Rusia llevó el asunto al Consejo de seguridad, Occidente había tornado las acusaciones contra ella, acusándola de preparar un ataque biológico bajo bandera falsa. Por su parte, la Organización mundial de la Salud ha indicado que han sido advertidos de la investigación biológica civil norte americana-ucraniana, y han pedido a Ucrania destruir los patógenos para evitar su propagación.

Por lo tanto, Ucrania, que cuenta con más de cien mil «nacionalista neo nazis» y les ha incorporado a su » Defensa territorial «, y que luego adoptó una ley sobre la discriminación racial, y que trabaja sobre armas biológicas ilegal, espera adquirir la Bomba atómica. !Hemos elegido olvidar los ejemplos de los héroes de la resistencia y el De Charles De Gaulle apoyando al presidente Zelensky !

Thierry Meyssan

Deja un comentario